Davinia Martinez, Lesión medular, Madrid, España.

Como os imaginaréis la vida no fue fácil. Mi hermana mayor me saca 7 años, lo pasó muy mal y hacer cosas que no había que hacer. A mí madre se le vino todo encima y también empezó a hacer cosas que no hay que hacer. Así que yo tuve que llevar el peso de todo desde pequeña y pasando noches en comisarías, hospitales y demás. Cuando ya parecía que todo se asentaba y calmaba..., pum, otra vez.

Con 16 años tuve un accidente de moto, yo iba de paquete y salí despedida 19 metros por debajo de un camión que no me pasó por encima de milagro. Terminé bajo las ruedas. El accidente fue en mi tierra, mi pueblo Nájera, así que me llevaron a la clínica, pero allí no había neurocirujano y me mandaron a Zaragoza en ambulancia, todo esto perdiendo el líquido medular. Cuanto más se pierde peor. Me operaron en Zaragoza fijando la espalda.

Me tuvieron un mes que no querían llevarme a Madrid, hasta que lo conseguí. Cuando llegamos a Madrid, al hospital Universitario de La Paz, me vieron y me dijeron que había que operarme, que me habían operado mal. Un médico se interesó por mí caso y decidió hacer una operación experimental. Casi 20 horas de quirófano para ponerme una fijación articulada para que con el crecimiento no me quedara como con joroba, porque estaba en edad de crecimiento. Fue a la primera que hizo esta operación, lo hizo después con otra chica pero no salió bien y ya me avisó que con el tiempo igual habría que retocar. El doctor neurocirujano y las doctoras traumatólogas de La Paz se implicaron mucho y les debo todo. Me tuvieron 3 meses, de los 8 que estuve en total, sin moverme nada de nada en una cama que se ponía de pie y boca abajo. Jamás me dijeron que volvería a caminar, pero tampoco me lo negaban así que no me rendí nunca.

Estuve casi 3 años intentando andar y lo conseguí gracias al esfuerzo y a los fisios de la Fundación del Lesionado Medular que está en Vallecas. He estado 10 años con muletas. Las usaba para todo y daba igual las caminatas y lo cansada que estaba, sabía que yo podía . En la Fundación no solo hacíamos rehabilitación, también hay talleres y deportes, y gracias a ellos he hecho muchas cosas, he sido protagonista en un haikurts, participado en varios cortometrajes, locutado y actuado en videos institucionales, posado para calendario y sesiones de fotos, que han salido premiada y expuestas en el CERMI MADRID, he trabajado detrás de las en un videoclip, desfilado en el Museo del Traje en el que la por aquél entonces princesa Leticia estuvo presente, he salido en programas de la televisión, RTV Seguridad Vital, Tú lo puedes evitar, y en el programa Lo Siguiente. En Telemadrid en Eso no se pregunta. Me han entrevistado en la radio, E  Casar en la noche. También hacía radioteatro, el cuál, representamos en una sala en Madrid.

En la Fundación también se hacen grandes amigos y te creas una familia. Yo tengo pareja desde el 2008, le conozco desde antes del accidente, salía con una ex-amiga. Pero empezamos a salir después de salir yo del hospital. Mi pareja y yo decidimos ser papás.

A mí el doctor siempre me dijo que yo si podría ser madre aunque no podía ponerme epidural porque la fijación está justo donde se pone, así que tendría que ser cesárea, porque por parto natural y sin epidural del esfuerzo el aparato se movería y habría que operar la espalda para colocarlo.

Total que el embarazo horrible y como soy de riesgo y con la tripota no podía, me senté en la silla y aquí sigo en ella, porque si no, no puedo hacer nada con el peque. Cuando el peque ya no requiera tanto de mí, volveré a recuperar mi marcha con muletas.

Tengo un taller de coches. Hago una vida normal, vivo con mi pareja y mi suegra. Hago la compra, comida, friego, plancho..., pero la gente me ve con el niño y la batec y alucinan.

Compañeros míos me han llegado a decir que si estaba loca por la decisión de tener un hijo en mi situación, en seriooo???; Yo pienso que la vida es un libro vacío en el cual tú vas escribiendo las páginas.