Noelia Gutiérrez, Endometriosis, Salamanca, España.
Endometriosis
"Nunca pierdas la sonrisa, levántate y continúa "
Noelia Gutiérrez
Noelia Gutiérrez
Soy una persona activa, comprometida con el mundo en el que vivimos. Intento poner mi granito de arena para que cada día podamos aprovechar al máximo la vida. Tengo endometriosis, en grado IV, una enfermedad que afecta a 1 de cada 10 mujeres. Produce dolores, calambres en las piernas, en los casos más graves puede ocasionar la pérdida de órganos. Es una de las causas más frecuentes de infertilidad en la mujer.
Cuando te diagnostican una enfermedad que no conoces no es fácil saber a qué te enfrentas, sobre todo si no te dan información sobre ella.
Cuando me diagnosticaron endometriosis tenía 17 años. Entré en el hospital con fuertes dolores y mucha fiebre, todo apuntaba a una intervención quirúrgica de apendicitis pero no, un cirujano dijo que no era apendicitis, por lo que me dejaron ingresada muchos días hasta que me derivaron a ginecología. Una vez allí tras muchas pruebas me diagnosticaron endometriosis, me operaron y me quitaron dos quistes.
Después de todo este trance, buscas información sobre la enfermedad, buscas ponerte en contacto con otras enfermas y comienzas con tratamientos. Hasta que hace tres años (8 después de la operación) dieron con uno que me funciona perfectamente y puedo hacer una vida prácticamente normal.
En todo este tiempo lo mejor que puedes tener es el apoyo de tu familia y amigos.
Ellos estan ahí cada día. Además un grupo de mujeres con endometriosis, con las que formamos la agrupacion de EsEndo. Nadie como otra afectada para saber y comprender que pasas en cada momento. Sin lugar a dudas conocerlas es la mejor parte de la enfermedad.
"Busca información, busca a otras afectadas que te ayuden y deja que tu familia y amigos sean tu apoyo diario."
Hoy día prácticamente hago una vida normal. Con tratamiento puedo ir cada día a mi trabajo, hacer actividades de ocio y deportivas.
Cuando el dolor llega, además de tomar la medicación para controlarlo, intento relajarme, reposar y sobre todo estar ocupada: leer, hacer manualidades o ver alguna serie, para que el dolor no sea lo que ocupe ese momento de mi vida.