Claudia Moya
Claudia Moya
Hola mi nombre es Claudia Estefani tengo 25 años , desde mi primera menstruación tuve dolores mensualmente pero al cumplir los 16 años fue aumentando mas y mas los dolores, habían momentos en las que eran tan intensos que ni respirar podía, siempre eran ampollas y mas ampollas para calmar ese dolor de "parto" lo decía aunque jamás experimente ni tengo hijos pero solía asimilarlo ya que sentía como si se me va a abrir la pelvis, en inicios me diagnosticaron quistes, me dieron tratamiento con pastillas pero ni así mejoraba, entonces que a los 20 años me puse grave y me tuvieron que operar.
Al enterarme del diagnóstico no entendía de que se trataba esta enfermedad. Pedí a mi médico tratante que me detallara minuciosamente mi caso y ahí pude aprender sobre la enfermedad del silencio, la ENDOMETRIOSIS.
Inicié mi tratamiento tomando reguladores hormonales por 6 meses , descansando 2 y retomándolo después. Me sentía un poco rara ya que no podía entender los efectos que causa esta enfermedad; son cambios muy fuertes.
Con el tiempo aprendes a vivir con tu enfermedad, hay momentos en las que simplemente tengo fiebre a veces mucho frío , cambios de humor, momentos sensibles, acné severo, subida o pérdida de peso... te vuelves cada vez sensible, a veces quisieras salir de este cuerpo porque son muchos cambios más los dolores que en estos 5 años fue mejorando pero no del todo.
Mis días son una lucha constante conmigo misma. Gracias a DIOS tengo una familia maravillosa que me brinda el amor infinito aunque no suelo compartir lo que pasó, lo afronto solo día a día, esa es mi meta del día salir fuerte siempre !!
Esta enfermedad quizá te limita algunos aspectos ya que hay días en los que debes reposar pero, por trabajo, no se puede. Al final, cada cierto tiempo, me da decaimiento. En lo personal fue difícil de asimilar, pero ahora puedo decir que es parte de mí.
Este año fue lo mejor ya que el destino permitió que conociera a una persona especial, al amor de mi vida, aquella persona que se convirtió en un soporte emocional, lo adoro tanto que el supo conocer, entender y comprender mi enfermedad desde que le comenté. Gracias Amor Mio, Luis Miguel, por comprender y hacer mis días especiales, así que el verdadero amor es aquel que llega y te convierte en parte suya, te ayuda, te motiva, te comprende y en esos momentos de crisis de llanto y llanto suele estar ahí, consolándote, brindando ese refugio ese Amor incondicional que esta dispuesto a todo por uno...
Ahora recibo tratamiento de mi médico, siempre me realizo chequeos, descartes y me encuentro asegurada en una empresa oncológica.
Mi vida gira día a día de Amor y empatía de parte de aquellas personas que son tu soporte y por ello luchas...
Se que es difícil pero no estas sola, te tienes a ti y las personas que amas serán tu inspiración. No dejes de soñar y cumplir tus sueños... Amo bailar, los niños, me gusta mucho conversar, caminar y soy muy hogareña, cariñosa y súper cariñosa.
La enfermedad la afronto con una lucha constante donde la meta es salir siempre fuerte.
Mi familia , mi amor y las verdaderas amistades que conocen de esto, siempre están dando ánimos para seguir adelante. He aprendido a quererme así, me quiero me adoro y admiro esta persona que sale ante todo a demostrar que sí, es posible salir de esta, aunque no se cura pero eres fuerte.