María Luisa Izquierdo, Artrosis, Madrid, España.

Voy a gimnasia y estoy muy contenta porque me encuentro bastante mejor y estoy encantada con la profe que tengo.  Voy dos días a la semana y me viene muy bien, me siento más animada, porque he estado un poquillo baja pero poco a poco me encuentro bastante mejor.

El parkinson procuras llevarlo lo mejor posible, me lo detectaron hace tres años, precisamente cuando me jubilé y cuando empecé a ir a clases de gimnasia. Toda la vida me la pasé trabajando al cien por cien y últimamente no me encontraba bien, no era yo, di un bajón tremendo, hasta mi marido me tenía que ayudar, me cansaba muchísimo, siempre había sido una persona muy activa. Acudí al médico. Me hicieron una prueba nuclear, me lo diagnosticaron rapidísimo y me pusieron un tratamiento. Luego acudí a otro médico especialista y me varió un poco el tratamiento y ahora me encuentro mucho mejor.  Voy los lunes y jueves a gimnasia y me viene fenomenal, me encuentro mejor, me muevo mejor, la profe me anima un montón, me corrige mucho y me aporta mucho.

En la columna me salió un poquito de artrosis. Fui a Aecosar porque me dolía la espalda y me encontraba cansada, además me acaba de jubilar y no podía quedarme en casa, entonces una vecina que iba a ir me animó a ir. Empecé a ir y me atendieron muy bien y voy mucho mejor.

La  artrosis me la detectaron hace poco, en enero de este año 2022 y me ha limitado a la hora de coger pesos y hacer movimientos bruscos, tampoco subo las escaleras como antes ya que voy con un poco de miedo de que cualquier movimiento brusco pueda dañarme a espalda. Creo que el haber estado tanto tiempo de pie pudo haber influido. Pero hago mi vida normal y toso está normal.

En casa me animan mucho, la verdad es que tengo suerte, es muy importante el apoyo familiar.

Casi nunca me había tomado una pastilla, solo muy esporádicamente un paracetamol, afortunadamente no sabía lo que era medicarme, sin embargo ahora me tengo que tomar dos o tres pastillas diarias. Pero estoy mucho mejor, antes no podía hacer la cama, sin embargo ahora sí, paso la fregona…  hago mis cosas sin depender de nadie.