Miguel Navarro
Miguel Navarro
Me llamo Miguel, vivo en Yeles, tengo 49 años y soy adicto al alcohol, a la cocaína y a la heroína.
Me fui metiendo poco a poco sin darme cuenta, con 17 años empecé a ir a fiestas, me gustaba mucho el bacalao y empecé con cocaína, anfetaminas y todo tipo de drogas y cuando me quise dar cuenta estaba ya con la heroína metiéndome en los poblados con los gitanos. Íbamos allí porque era donde mejor cocaína tenían y la vendían al mejor precio. Ahí ya fue un desenfreno total consumiendo droga a diario. Había dos poblados La Celsa y La Barranquilla, ahí fue donde empecé con la heroína, también consumía alcohol y crack o cocaína en base todos los días.
Así estuve casi 30 años. De aquellas trabajaba y me las apañaba también vendiendo droga los fines de semana. También trabajaba algo para los gitanos, trabajos de electricidad y algunos arreglos.
En aquella temporada vivía en Rivas, la convivencia con mis hermanos era mala, yo no quería saber nada de ellos, la única persona que se preocupaba y me ayudaba era mi madre. También estuve ingresado seis meses en una comunidad terapéutica, para desintoxicarme, y lo conseguí, salí bien con un trabajo pero luego empecé otra vez a beber y también con la cocaína y la heroína. Mi madre murió y me tocó ir a Yeles a vivir.
En Yeles fue mi hermano quien me ayudó a decidir entre ellos o la droga. Lo que me salvó, fue encontrar la asociación. La primera vez, cuando fui, trabajaba con mi hermano, en el trabajo bebía y mi hermano me dijo que tenía que elegir entre el trabajo y las drogas. Decidí empezar en la asociación para poder seguir trabajando porque era un ultimátum, o me echaban a la calle o iba a la asociación.
En la asociación me trataron muy bien, hay gente muy maja y que te ayuda mucho. Desaparecí de la forma de vida habitual que llevaba una temporada. En esto hay que alejar de tu vida a todas las personas que conoces y que están en relación con el mundo de las drogas, si no las olvidas das un paso atrás, nunca vas a salir, siempre te van a ofrecer y no vas a tener voluntad para decir que no y lo mejor es olvidarte de esa gente, de sus teléfonos. Tienes que cambiar al cien por cien, si vuelves al entorno de antes que consumía, malo, a mí me pasó y tuve una recaída. . Estuve un par de años sin consumir y luego recaí, volví a consumir otra vez cocaína en base y heroína.
Al principio cuesta mucho pasar el periodo de abstinencia, tienes muchas ganas de consumir, yo vivía y vivo solo y puedo salir a consumir cuando quiera, entonces tengo que apoyarme mucho en mis compañeros, hablar por teléfono con ellos y hablar sobre lo que me está pasando, eso ayuda mucho, me dan muchos ánimos. Es fundamental saber que a cualquier hora del día tienes el apoyo de un compañero que te pueda ayudar en un mal momento. Dentro de la asociación hay muchos medios y ayudas para poder salir.
Tuve dos recaídas más, en la primera y en la última tuve un accidente grave de moto, creo que esta es ya la definitiva. En el accidente estuve a punto de morir, estuve cuatro meses en la UCI del Doce de Octubre. Me han quedado secuelas en la cadera y en las costillas. Ahora llevo un año y seis meses sin consumir, viviendo solo en mi casa y yendo a la asociación.
Ahora estoy pensando en ingresarme otra vez en otra comunidad terapéutica a través de la UCA que son equipos de atención a drogodependientes. La solicitud ya está tramitada y será cuestión de tiempo el que me concedan el ingreso.
Espero que mi experiencia pueda servir de ayuda a personas que estén o hayan pasado por una situación parecida. No hay que venirse nunca abajo, hay que seguir adelante, la vida, aunque aveces es muy dura y te da muchos palos, merece la pena seguir viviéndola, se pueden encontrar cosas buenas, yo ahora estoy pasando una mala racha de ánimo pero, poco a poco, lo estoy recuperando, es cuestión de tiempo.
La gente que tenga el mismo problema que yo tiene que dejar las drogas y las asociaciones están muy bien para salir de la adicción y para empezar una nueva vida.
Estoy con incertidumbre, salí pero me está costando, por eso estoy yendo a terapias para reforzarme, cuando quiero consumir me acuerdo del accidente de la moto donde estuve a punto de morir. También me veo y pongo en la balanza el como estaba antes y como estoy ahora, y ahora estoy mucho mejor que antes, por supuesto. También hago ejercicio en casa.