Oscar Santabárbara
Oscar Santabárbara
Me llamo Oscar y tengo 45 años. Soy enfermo de Crohn desde 1994. Era una persona muy alegre, algo payaso. No era un deportista, más bien lector y caminante por montañas. Llevo más tiempo con esta compañera que estando "sanito". Al principio me limitó bastante, pues aunque se controlaba relativamente fácil había brotes cada 2 por 3... y luego vinieron los "daños colaterales", como dolores articulares que dificultaban cualquier actividad física intensa...
De entrada no supe qué hacer con el diagnóstico. Me lo explicaron bien, pero no me lo creía. Nadie de mi familia tuvo jamás algo parecido. Me preguntaba ¿por qué yo? Pero con la guía de mi doctora de digestivo y la paciencia de mis padres fuimos sorteando las sorpresas de la enfermedad. Ellos fueron mi apoyo aunque estuviésemos algo perdidos. Esa enfermedad es un aprendizaje constante, un ensayo/error de esto puedo comerlo o no, esto si lo hago, me duele o no...
No tuve más apoyos, y por aquella época no había Internet en casa.
Nuestra fuente de documentación eran artículos de prensa y cuando tenía visita de control en el Hospital.
Seguí adelante, no había otra... era una lotería y me tocó.
Ahora mismo llevo 2 años en remisión gracias a un medicamento que me está viniendo muy bien; tuvimos dudas yo y la doctora para dármelo, pero fue un acierto genial.
El día a día es levantarme y luchar porque no me sirve quedarme escondido en la cama... la salida está en nosotros y en lo que nuestros médicos nos recomienden para seguir adelante con nuestra vida de forma normal en la medida de lo posible.
Ha habido momentos de mucho desánimo porque hay enfermedades asociadas al Crohn, como la artritis y la espondilitis anquilosante.
Mucho dolor articular que me limitó, pues me atacó fuerte. Pero por voluntad sigues aunque cojees y cumples tu vida, llegas a casa y descansas.
Mi bicho duerme... que dure... habrá salida.