Al recibir el nombre de cáncer ya te deja cao. Si además te dicen que en la misma, mama hay dos tumores y uno más dañino te quedas muy impactada.

Dices esto no me puede estar pasando. Me encontraba perfecta. Te hablan de operación y tratamiento inmediato y casi no te da tiempo más, que a entrar en una vorágine de pruebas diagnosticas y preparatorias para todo lo que vendrá después.

Además la caida de cabello, el cambio físico de mama, etc. Como mujer te deja todavia más hundida.

Encontré a mi familia dándome un inigualable soporte y fuerza. También un equipo con la onco, la Dra. Maria Jesús Vidal del Hospital Clínic de Barcelona, que me ha curado y me ha dado fuerza y seguridad en el tratamiento.

En mi caso lo pase en plena pandemia. Como factor negativo pasé un miedo añadido y como positivo estuve en casa como todo el mundo.

Una asociación en facebook "Cáncer de mama, si se puede" recomendada por mi equipo médico, donde todas aportamos experiencia y conocimientos da un extra, de fuerza diaria. también colaborar con la fundación Oafi que hacen una labor magnífica de la que soy socia y voluntaria, que nos proporciona taichi y otras actividades gratuitas me da fuerza para ayudar como voluntaria. Y a Kurere agradecer la posibilidad de poder ser útil con mi experiencia.