María Zamorano, Cáncer de tiroides, Zamora, España.
Cáncer de tiroides
"Lucha siempre, la recompensa merece la pena"
María Zamorano
María Zamorano
Mi nombre es María, tengo 36 años y hace 3 años que fui diagnosticada de NEOPLASIA ENDOCRINA MÚLTIPLE TIPO 2A.
En una de las etapas más felices de mi vida donde lo tenía todo, un trabajo estable, una familia que me hacía muy feliz, de repente la vida me quiso dar lo que ha sido para mi , la lección más importante que he recibido hasta ahora.
Todo iba genial, practicaba deporte a diario, comía sano... pero, algo no iba bien. Un día trabajando comencé a sudar muy frío, el corazón se me aceleró y comenzó un dolor de cabeza, como jamás había tenido. No sabía que ese día marcaría un antes y un después ya que esos episodios se convertirían en frecuentes
Tras muchas visitas a diferentes especialistas, se detectó mi primer tumor
Jamás olvidaré ese día, ni los abrazos de Rosa, la enfermera. Fui sola al especialista porque en principio solo tenía que recoger unos resultados de una analítica que apuntaban a ser normales y fueron todo lo contrario. Ese día fue traumático, no acertaba a llamar a ningún familiar, estaba completamente bloqueada. No podía estar pasándome a mí, lo que veía muy de lejos, ahora estaba en mí. Lo veía tan lejos.... Después de la operación se confirmó lo que temíamos, era cancer medular de tiroides. Después vino el feocromocitoma (otro tumor en las suprarrenales) y con ellos los miedos, las visitas al hospital y mucha confusión . Era tanta información y todo iba tan rápido que no podía ni procesar.
Comencé a aceptar la enfermedad a medida que recibía información, a medida que preguntaba y a medida que sentía todo el cariño de mi gente (eso fue el mayor chute de energía que puede tener), mi habitación parecía un club social, siempre llena de gente a darme su cariño. Que agradecida estoy. Pero sobre todo lo que más me ayudó y me despertó de verdad fue ver a mi madre sufrir. Ese día prometí que mientras continuara con vida mi madre no podía llorar más..., y mi truco fue SONREÍR SIEMPRE DELANTE DE ELLA. Tanto sonreí que me ayudó a estar positiva, y esa sonrisa me devolvió la vida porque a partir de ahí, mentalmente comencé a sentirme mejor, a luchar a pesar de esos días de bajón y a sentirme más fuerte que mi enfermedad .Tenía solo 33 años , como no iba a luchar si lo que más me gusta es vivir ?????.
SONRIELE A LA VIDA Y LA VIDA TE DEVOLVERÁ ESA SONRISA.
"Si la vida te da limones, hazte un zumo"
Hoy en día sigo impresionada, fue un impacto enorme y creo que solo quien recibe una noticia así, sabe como nos podemos llegar a sentir. Repito que para mí es la mayor lección de vida hasta ahora, me encuentro bien, en proceso todavía de adaptación a esas cosas que ya no puedo hacer y descubriendo otras que si puedo hacer y que me encantan, estoy feliz de estar aquí sentada contando mi historia y viviendo, ahora siento más que nunca y aprecio los detalles más simples.