Edgar Mendoza
Edgar Mendoza
Tengo 43 años, soy de Encarnación Paraguay, estoy casado, tengo 3 varones. El mayor tiene 16, el del medio 13 y el menor 10. Ellos son mi motores, son mi fuerza.
Esta es mi historia, fue el 4 de julio del 2019, cuando tuve un obstrucción urinaria, fue muy dolorosa, no podía orinar, me agarró en el trabajo. Fue de terror, cuando me pasó, pedí permiso en mi trabajo y fui a casa a buscar a mi señora y le comenté que estaba con un dolor impresionante y que no podía orinar.
Enseguida llamó a un amigo doctor pero estaba de viaje, aunque ya volviendo a Paraguay. Entonces decidimos ir al hospital público y allí solucionaron la obstrucción. Mientras estaba en observación, luego de 30minutos, volví a tener otra obstrucción, entonces me dejaron preparado para que no se repitiera y me derivaron a un urólogo pensado que podía estra relacionado con la próstata.
Fuimos a casa recién y nos dieron turno para el urólogo para la semana siguiente. Mientas tanto yo anduve con la sonda puesta para que no volviera a tener una obstrucción. Al día siguiente me llamó mi amigo doctor, que nos dijo que ya estaba de vuelta en su consultorio y que me vería la tarde a ver que estaba pasando. Le expliqué lo que me había pasado y me hizo una ecografía, grande fue la sorpresa y dijo acá está el problema, esta fea la situación el riñón derecho está totalmente tomado por un tumor. Ordenó una tomografía sin contraste para salir de las dudas, y sí, de hecho era un tumor.
Fue un diagnostico terrible, lo primero que le pregunté fue cuanto tiempo de vida me quedaba, se rio y me dijo que eso tenía solución, que hay gente que vive muchos años con un riñón, pero que si teníamos que movernos urgentemente.
Me dio dos opciones que pasaban por ir a Argentina o a Asunción. Mi amigo, el doctor, fue pieza fundamental para comenzar ese proceso. Me dio fuerza y me dio tranquilidad. Fuimos a casa y nos reunimos con mis hermanas y cuañado para ver que decisión tomar, la elección de viajar a Asunción, mi cuñado me puso en condición el auto y viajamos a Asunsión, ya que tengo una tía que es anestesista en un hospital muy impórtate de Asunción.
Al comentarle a mi tía la situación no dudo ni un segundo, me dijo que me fuera para Asunción lo más rápido posible, sinceramente fue como un ángel, gracias a ella y a mi tío, pudimos ir superando todos los obstáculo.
Ahí comenzó el proceso de controles y estudios, casi un mes de estudios y análisis. Los cirujanos estaban preocupados porque la vena cava no estuviese comprometida, pero no se podía ver casi en ningún estudio de tomografía, ni en ecografías. Fue casi un mes de ir y venir, de Asunción a Encarnación hay 366 kilómetros, era muy duro todo. Dejamos a mis hijos al cuidado de una sobrina, . Nunca quise separarme de mis hijos, los extrañaba mucho, pero teníamos que pasar ese proceso, realizamos muchos estudios y analisis, que no era nada fácil y tambien era mucho gasto, y ahí entraron los amigos, parientes, primos, compañeros de trabajo, aparecieron gente extraordinaria que me ayudaron mucho. Que sin sus ayuda no podria haber logrado, les estare eternamente agradecidos,
Después de muchos estudios nos dieron fecha de cirugía para el 19 de agosto del 2019, fue entonces que viajamos nuevamente con mi señora para esa cirugía un 17 de agosto, nos fuimos preparados con todo, fue terrible despedirme de mis hijos, no sabíamos cuánto tiempo estaríamos en Asunción.
Por fin llegó el día de la cirugía, se realizó una nefrectomía radical derecho, entré en quirófano a las 9:00 a.m. y salí a las 15:00 h. Luego de ahí, fui a terapia intensiva 24 horas. Yo sabía que iba a salir todo bien, tenía muchas personas rezando por mí, dándome fuerza y, aliento, a mis amigos y a mis familiares. GRACIAS!!
Estuve internado una semana, mi señora siempre estuvo a mi lado. Luego de una semana me dieron el alta con la herida todavía sin curar bien y fui a la casa de mis tíos, estuve una semana más ahí, un primo fue a buscarme, mas que un primo un hermano, gracias primo y volvimos a casa a esperar el resultado de la biopsia.
Luego de un mes nos dieron el resultado que salió T3 estadio 1, los doctores recomendaron quimioterapia, pero lastimosamente no se pudo conseguir ese remedio porque costaba muy caro y no lo administraban en el hospital público.
Entonces los doctores nos recomendaron un control cada cuatro meses para ver si no aparecía nada nuevamente.
Lastimosamente en diciembre del 2020, en el último control, aparecieron nuevamente cuatro nódulos, tres alrededor donde estaba el riñón derecho y uno en el pulmón.
Volvimos a viajar a Asunción y los cirujanos nos derivaron nuevamente a quimioterapia. Ahora ellos no creen que todavía sea quirúrgico y estoy esperando la fecha para volver a consultar con la parte de quimio, para ver que recomiendan ellos, si quimio o cirugía, ellos tienen la última palabra.
Estoy muy bien, muy optimista con muchas ganas de seguir para adelante y esperando la fecha para volver a viajar y saber qué camino seguir.
Estaré eternamente agradecido a mi tía y mi tío, a mi señora, a mis hijos por estar ahí, mis hermans, a mis amigos y todos mis parientes.
Estoy con mucha fuerza, disfrutando día a día, disfrutando de mis hijos, de mi señora y de mi familia, demostrando el amor que les tengo y le agradezco a Dios por cada día que me regala.